El jengibre
El jengibre

En nuestra serie de entradas del blog "Superalimentos", ya hemos hablado de algunos superalimentos bastante desconocidos, como la ortiga. Pero también hay algunas estrellas culinarias que constantemente se destacan por sus beneficios para la salud. El jengibre es uno de ellos.
El jengibre se ha utilizado tanto en la medicina tradicional como en la cocina durante siglos y es conocido por su sabor intenso y picante, así como por sus impresionantes beneficios para la salud. Originaria del sudeste asiático, esta raíz se ha consolidado mundialmente como planta culinaria y medicinal, y es un ingrediente indispensable en cocinas y farmacias. Pero ¿qué hace que el jengibre sea tan excepcional?
El jengibre, el superalimento
Entre los superalimentos, el jengibre destaca no solo por su sabor picante, sino también por sus numerosos beneficios para la salud. Entre sus propiedades más destacadas se encuentra su capacidad para facilitar la digestión y aliviar las náuseas, lo que lo hace especialmente útil para el mareo por movimiento, las náuseas matutinas y las molestias posoperatorias. Además, el jengibre posee propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a tratar la artritis, así como propiedades analgésicas que lo convierten en una alternativa natural para aliviar el dolor menstrual y las migrañas.
Además de fortalecer el sistema inmunitario gracias a sus propiedades antioxidantes, el jengibre también tiene un efecto positivo en afecciones como la diabetes, ya que sus compuestos penetrantes ayudan a regular los niveles de azúcar en sangre. Los gingeroles del jengibre desempeñan un papel importante en la prevención de ciertos tipos de cáncer al inhibir el crecimiento de células cancerosas, en particular el cáncer de estómago, colon y mama.
Promover la salud cardiovascular es otro aspecto destacado del jengibre, ya que ayuda a reducir los coágulos sanguíneos y mejora el colesterol y la presión arterial. Su capacidad para estimular el metabolismo y promover la saciedad lo convierte en un ingrediente popular en los programas de control de peso.
El jengibre también es valorado por sus efectos antiestrés y estimulantes del estado de ánimo. Puede ayudar a reducir las hormonas del estrés y promover el bienestar general.
¿Cómo utilizar el jengibre?
Para uso culinario, el jengibre está disponible en diversas presentaciones: fresco, seco, en polvo, en aceite y extraído. El jengibre fresco se utiliza a menudo por su intenso sabor en batidos, tés, sopas, salsas y adobos. El jengibre seco y molido se conserva durante más tiempo y es ideal para productos horneados, mezclas de especias y bebidas. Las presentaciones concentradas, como el extracto y el aceite de jengibre, se utilizan en suplementos dietéticos y aromaterapia.
Probablemente el uso más clásico del jengibre, especialmente si lo valoras más por sus propiedades beneficiosas para la salud que por su sabor, es el té de jengibre.

El té de jengibre es muy fácil de preparar. Primero, corta el jengibre en 3 o 4 rodajas finas y vierte agua caliente sobre ellas. Después, añade miel y zumo de limón al gusto. También puedes usar 1 o 2 rodajas de limón si lo prefieres. Finalmente, deja reposar el té unos 10 minutos y ya puedes disfrutar de este saludable té de jengibre.

Si no te gusta el té, puedes usar jengibre en diversos platos. Un buen ejemplo es el pollo al jengibre con verduras, y aquí te explicamos cómo prepararlo:
- Prepare la marinada: En un tazón, combine la salsa de soya, la miel, el aceite de sésamo, el jengibre picado y el ajo. Agregue las tiras de pollo y deje marinar en el refrigerador durante al menos 30 minutos.
- Prepara las verduras: Calienta el aceite vegetal en una sartén o wok. Agrega las verduras y fríelas hasta que estén tiernas pero crujientes. Retíralas de la sartén y reserva.
- Cocina el pollo: En la misma sartén, fríe las tiras de pollo (sin exceso de adobo) hasta que estén bien cocidas y ligeramente doradas.
- Mezclar: Agregar las verduras asadas al pollo en la sartén. Remover bien para que todo se caliente uniformemente.
- Presentación: Sazonar con sal y pimienta. Opcionalmente, decorar con semillas de sésamo y cebollín picado.
Conclusión
Sus diversos beneficios para la salud y su amplia gama de usos convierten al jengibre en un verdadero superalimento. Ya sea para prevenir enfermedades, fomentar un estilo de vida saludable o simplemente enriquecer la experiencia culinaria, el jengibre merece un lugar permanente en todos los hogares. Su vibrante presencia en diversas culturas y gastronomías de todo el mundo atestigua su universalidad y eficacia. Por lo tanto, el jengibre es más que una simple raíz: es una fuente de salud y bienestar.
