Por qué tu vida diaria determina la salud de tu espalda
Por qué tu vida diaria determina la salud de tu espalda

La espalda es un verdadero problema para muchas personas. Junto con el dolor de cabeza, el dolor de espalda es uno de los síntomas más comunes y también tiene una alta tasa de cronicidad. Esto significa que el dolor de espalda agudo a menudo se convierte en una afección crónica.
Según una encuesta del Instituto Robert Koch, más del 60% de los encuestados padecen dolores de espalda, especialmente en la zona lumbar. Un 15,55% de los encuestados incluso padecen dolores de espalda crónicos, siendo las mujeres las más afectadas que los hombres.
La salud de la espalda es un tema con enormes consecuencias y el elevado número de personas que sufren dolor de espalda cada día en casa o en el trabajo demuestra que es necesario actuar.
En este artículo, analizaremos algunos factores cotidianos que pueden provocar dolor de espalda. Al final, te proporcionaremos un breve folleto con diversos ejercicios que puedes realizar de forma óptima en tu esterilla de cristal y con los que podrás fortalecer la salud de tu espalda.
Influencias cotidianas en la salud de la espalda
Las influencias cotidianas en la salud de nuestra espalda son diversas y a menudo se subestiman. Para romper el ciclo de dolor y malestar, es importante reconocer estos factores y abordarlos activamente. Hemos recopilado algunas de las causas más comunes de problemas de espalda que acechan en la vida diaria y explicamos cómo puedes fortalecerla.
1. Postura sentada y condiciones ergonómicas de trabajo
En nuestro mundo moderno, pasamos mucho tiempo sentados, ya sea en un escritorio, en el coche o en el sofá. Una mala postura y un diseño de puestos de trabajo poco ergonómico pueden provocar una tensión incorrecta en la columna vertebral, que se manifiesta en dolor de espalda. Asegurarnos de que nuestro puesto de trabajo esté correctamente alineado puede prevenir muchos problemas. Las sillas ergonómicas, los escritorios con altura ajustable y la correcta posición del monitor son cruciales.
Incluso los pequeños cambios pueden tener un gran impacto. Por ejemplo, empieza por revisar tu postura al sentarte. Lo ideal es que tus pies estén apoyados en el suelo y tus rodillas en un ángulo de aproximadamente 90°.
Si trabaja en una oficina, la posición del monitor y el ratón también es importante. El monitor debe estar a la altura de los ojos para evitar tensión en el cuello y los ojos. El teclado y el ratón deben estar lo suficientemente cerca como para que no tenga que estirar demasiado los brazos y pueda mantenerlos paralelos al suelo.
2. Falta de ejercicio
Nuestros cuerpos están diseñados para el movimiento, pero el estilo de vida moderno suele promover lo contrario. La actividad física regular no solo mantiene sano nuestro sistema cardiovascular, sino que también es esencial para fortalecer los músculos de la espalda. Mediante ejercicios específicos, podemos fortalecer los músculos del core, lo que crea una base estable para la columna vertebral y puede prevenir el dolor de espalda.
Así que, haz muchos ejercicios en casa, como los que te ofrecemos en nuestro folleto a continuación, o fortalece los músculos de la espalda con diversos ejercicios con pesas. Todos los gimnasios importantes cuentan con numerosas máquinas diseñadas específicamente para fortalecer zonas específicas de la espalda.
3. Levantamiento y transporte incorrectos
Muchos problemas de espalda surgen por levantar y transportar cargas pesadas de forma incorrecta. Es importante flexionar las piernas al levantar y mantener la carga cerca del cuerpo para proteger la espalda. Las sesiones de entrenamiento centradas en la técnica correcta de levantar y transportar pueden ayudar a prevenir lesiones y fortalecer los músculos de la espalda.
4. Estrés y tensión psicológica
El estrés y la tensión psicológica también pueden manifestarse físicamente, especialmente en la espalda. La tensión y el dolor suelen ser el resultado. Las técnicas de reducción del estrés, como el yoga, la meditación o la atención plena, pueden ayudar a reducir la tensión psicológica y, por lo tanto, a mejorar la salud de la espalda.
5. Hábitos de sueño
Nuestros hábitos de sueño también pueden tener un gran impacto en la salud de nuestra espalda. Un colchón viejo o inadecuado, una postura incómoda al dormir o la falta de un reposacabezas que sujete bien pueden provocar dolor de espalda. Invertir en un buen colchón y optimizar su entorno de descanso puede ser muy beneficioso para la salud de su espalda.
La necesidad de fortalecer la espalda
Todos estos factores demuestran la estrecha relación que existe entre nuestra vida diaria y la salud de nuestra espalda. La buena noticia es que podemos hacer mucho para fortalecerla mediante decisiones conscientes y cambios de comportamiento. Una combinación de ajustes ergonómicos, ejercicio regular, levantar y cargar objetos de forma consciente, gestión del estrés y un sueño óptimo puede ayudar a reducir significativamente el riesgo de dolor de espalda.
Si realiza regularmente los siguientes ejercicios de nuestro folleto y, en el mejor de los casos, dispone de un producto VITORI®, no solo podrá controlar su dolor de espalda, sino que también podrá evitarlo en el futuro.
¡Tu espalda te lo agradecerá!
⬇️ Haz clic aquí para ver el libro de ejercicios ⬇️
